- Bien podríamos decir, como aquel autor, que la oscuridad sirve para representar la existencia aterradora de cosas que escapan al alcance de nuestros sentidos, y a pesar de ello ejercen su poder sobre nosotros.
- Sin llegar a refrendar lo que decía Odile Redon, sobre lo de que hay que respetar el negro porque nada lo prostituye y es el agente del pensamiento, el colombiano LEGUÍZAMO establece una plástica cuya función comunicativa es muy dependiente de su referencia a la persona o personaje.
- No sólo su magnetismo cromático sigue fielmente el denominador de las tras dimensiones de matiz, luminosidad y saturación, sino que además muestran una expresión fuerte que no sabemos cómo se produce pero sí cómo nos llega y se recibe. No son portadores de identidad, son lo que siempre fuimos: blasfemos sin rostros visibles anclados en sus propias tinieblas.
Son los pies de barro los que hacen precioso el oro de la estatua.
(Oscar Wilde)